Cuando el Elche se queda a medias

El Elche CF desaprovechó una nueva oportunidad de meterse en los puestos de privilegio tras la derrota del pasado sábado en el Martínez Valero ante el Sporting de Gijón. Los franjiverdes venían de sumar 4 de 6 ante Rayo y Girona, y lo más importante, las sensaciones ofrecidas, y llegaba al coliseo franjiverde un conjunto asturiano en plena crisis de resultados. El partido invitaba al optimismo tras los estados de forma de unos y de otros, pero los de Pacheta estuvieron imprecisos, sin ideas y no cuajaron un buen partido.

Sólo Iván Sánchez, Gonzalo Villar y de nuevo, Edgar Badía, estuvieron al nivel. El jienense parece volver a su nivel habitual y fue el jugador más activo y con la sensación de que algo podía pasar cuando tenía el balón en sus pies, junto a un Gonzalo Villar que se está erigiendo en el dueño y señor del centro del campo ilicitano, cada vez con más confianza, demostrando la clase que atesora. Y de nuevo, el arquero ilicitano sostuvo al equipo con opciones hasta el final con sus decisivas intervenciones una vez más.

Por tanto, ¿a qué aspira el Elche CF en esta temporada? Pues ni hay que venirse arriba en los buenos momentos ni venirse abajo en los malos, y es que como dijimos, este equipo es capaz de competir contra cualquiera, pero lógicamente, se tendrá días mejores y peores. Así que, el objetivo principal es y será la permanencia, y una vez conseguido, soñar con cotas más altas. Cierto es, que tras las últimas actuaciones más de uno habrá pensado o soñado con meterse arriba, pero, recordad de dónde venimos y cómo estábamos en agosto. Paso a paso.

Miramos al futuro y este próximo domingo en Huesca los de Pacheta tienen una nueva oportunidad de competir y demostrar que ante los grandes este equipo se crece y ofrece su mejor versión. Será un partido difícil, como todos, y habrá que saber jugar con la "necesidad" del equipo oscense, obligado a ganar tras sus últimos tropiezos. Confiemos.