Elche CF | ANÁLISIS
Conjura franjiverde
El vestuario del Elche CF lanza mensajes de optimismo y pasa la presión al RCD Mallorca. Los jugadores recuerdan la situación privilegiada en la que está el equipo y aseguran que muchos conjuntos se cambiarían por el de Francisco en esta recta final
La plantilla del Elche CF huye de la presión y pone en valor todo lo conseguido durante la temporada. No hay mejor situación que la franjiverde para mirar de frente al objetivo de la permanencia y los treinta y dos puntos que se han sumado en el casillero son la teoría convertida en práctica. Ni tan siquiera un tropiezo el próximo sábado ante el RCD Mallorca marcaría el final de curso para el conjunto de Francisco, que pasa la obligación a su rival sabedor de las necesidades que tiene tras haber cambiado de entrenador hace dos jornadas.
El vestuario se ha encargado durante los últimos días de enviar un mensaje positivo que genere confianza en el entorno. Raúl Guti aseguraba tras la derrota ante la Real Sociedad que “ni antes éramos tan buenos ni ahora somos tan malos” recordando que “nadie nos puede bajar la moral” tras las tres últimas derrotas sufridas. Por su parte, Gerard Gumbau hacía hincapié en COPE Elche (100.8 FM) de que “si nos dicen a principio de temporada que íbamos a estar en esta situación la firmábamos. Dos mensajes que unidos al de Fidel, “presión es lo que tuvimos en Cádiz el año pasado en el descanso” reflejan el estado del vestuario.
Los franjiverde se jugarán el sábado puntos de permanencia en la penúltima batalla por la permanencia. Una nueva oportunidad para convertir la teoría en práctica, para que todos los mensajes de conjura y de buenas intenciones que se están lanzando durante los últimos días no caiga en saco roto y el ADN franjiverde demuestre que las palabras nos e las lleva el viento. Si algo ha conseguido este equipo en lo que llevamos de temporada, además de los treinta y dos puntos que luce en su casillero es tener el beneficio de la duda. El derecho a que se crea en él de manera firme.
Aspectos positivos
Quizás no sea el mejor momento de la temporada en cuanto a resultados pero la forma en la que se termina un partido dice mucho del estado de salud de un grupo. No todo lo que se ha hecho está mal, aunque la permanencia pasa por un cambio. Toca destilar y reciclar, pero también hay aspectos del fin de semana que se deben reforzar. Que no estamos tan mal y eso se le debe transmitir en el día a día a un grupo de jugadores que absorben lo que el entorno les proyecta. Es el momento de creer en que la penúltima batalla se puede ganar y si nos e consigue siempre quedará otra hasta que llegue la batalla final para ganar la guerra.
