Tirón de orejas

No hay más ciego que el que no quiere ver. El refranero español es sabio y explica muchas veces la realidad, cuando las palabras intentan maquillarla. Pere Milla y Carlos Clerc fueron más contundentes a la hora de explicar los motivos de la derrota del Elche CF en Pamplona, que Sebastián Beccacece. El entrenador argentino tuvo que acabar desembocando en un problema táctico, derivado de cuestiones físicas de futbolistas, para asumir responsabilidades. No quedaba otra.

El entrenador argentino fijaba, junto con recurso habitual de "los detalles", las claves de la derrota sufrida en El Sadar en "los dos cambios obligados por molestias hicieron no poder sostener lo bueno del juego de la primera parte". El técnico rosarino recordaba que "la ausencia de Fidel nos quitó posesión". Beccacece optó por mover banquillo apostando por soluciones defensivas, que removieran el once titular y lo reestructurasen por el simple movimientos de fichas, en lugar de dar entrada a jugadores ofensivos.

Sin plan B

La salida de 'Tete' Morente dejó sin plan B ni alternativas al sudamericano, que en esta ocasión ya debía reconocer que "ya no teníamos ese protagonismo y era mejor tener especialistas en zona baja, y tener más altura, que era donde estábamos jugando" argumentando que "buscanos un cambio para resguardarnos y tener más presencia aérea, porque nos habían cabeceado en balón aéreo. Optamos por un central (Diego González)".

Las decisiones tácticas llegaron entre el minuto 50 y el minuto 63. Trece minutos en donde Beccacece olvidó jugadores de ataque como Josan o Nico. Álex Collado y Ponce saltaron al verde a tres minutos para el final del encuentro. El equipo pasó a jugar en bloque bajo, tanto por la voluntad táctica de su entrenador como por el empuje de CA Osasuna, y el desenlace es por todos sabido con un Abde que marcó la diferencia para sentenciar el conservadurismo de Beccacece.

Mensaje del vestuario 

Pere Milla y Carlos Clerc no han sido tan condescendientes como Sebastián Beccacece. El delantero no dudó en señalar tras el partido que "no tenemos equipo para meternos tan atrás" y añadía que "a veces, por circunstancias del partido, te meten pero tenemos que ser valientes e ir a por el rival todo el partido". El ilerdense, que no se muerde la lengua y siempre habla claro, insiste en el que "teníamos que haber ido más a por ellos y ser más ambiciosos".

Por su parte, Carlos Clerc seguía los pasos se su compañero de equipo. El defensa también miraba hacia el banquillo y destacaba que "no hemos mantenido la idea de la primera parte" y explicaba que "nos ha faltado tener un poco más la pelota en la segunda parte para crear más peligro. Hemos intentado salir en alguna contra, igual podíamos haber hecho algo más en la segunda parte para mantener el 0-1 de la primera mitad".

El mensaje de Pere Milla y Carlos Clerc refleja la realidad de una segunda parte en donde el Elche CF cambió su propuesta futbolística. Las sustituciones obligadas jugaron su porcentaje dentro del partido, pero no tanto como las decisiones adoptadas por Beccacece que tenía jugadores de refresco suficientes para optar por un planteamiento que mantuviera la esencia de los visto en la primera parte y fuera continuidad al juego franjiverde.