Que lo explique la propiedad

Nico Rodríguez ya conoce a José Sepulcre. Realmente lleva conociéndole cuatro meses. El director deportivo franjiverde ha firmado un contrato por cuatro años, para dar forma a un proyecto que en cuatro meses ha dinamitado todas las bases que en su día se sentaron. Comedido pero sin morderse la lengua a la hora de poner sus cartas sobre la mesa, elegante en su mensaje y directo en sus impresiones. Un discurso que ha tenido todas sus palabras medidas y calculadas. El asturiano ha explicado su verdad, la que ha vivido en primera persona y que no ha tenido miedo a esconder. El proyecto ha dejado de ser proyecto en el momento en el que nació muerto con una cifra que se ajustaba más a la ilusión inicial que a la realidad final.

El asturiano va conociendo poco a poco cómo se trabaja en el Martínez Valero y cómo lo que un día es blanco, a las horas puede ser negro, y viceversa a la mañana siguiente. Bienvenido al Elche CF. Ese que, a pesar de que se dice va a cambiar sigue siendo el mismo porque quien lo dirige sigue siendo el mismo. Podrá cambiar la cara presidencial o la de la dirección deportiva pero el que mueve los hilos sólo ha cambiado el título. Primero de presidente a accionista de referencia y, después, de accionista de referencia a máximo accionista. Es incomprensible que un proyecto que tomaba la línea de salida hace tres meses, no se haya podido completar, y espérate a lo que venga después.

Experiencias del pasado

Nico Rodríguez ha dicho más con sus silencios, pocos pero significativos, que con sus respuestas. Palabras que, entre líneas, reflejan el desorden en el que vive este Elche CF, no esta temporada si no desde hace ya unas cuantas. El empieza a gastarte seis o seis medio, para acabar teniendo tres trescientos, que acaban en dos ochocientos, y suben hasta cinco; queda muy lejos de lo inicial. Así se empezó hace unos cuantos años. Cambiando la calculadora por el ábaco para matar una y contar veinte. El “aixó quí ho paga, aixó ho pague jo” debería de haber quedado hace mucho tiempo desterrado porque, al final, más allá de proyectos, se trata de imagen. De impresiones y sensaciones que sólo se viven en primera persona cuando alguien llega a un puesto de trabajo sin saber y acaba sabiendo con el paso del tiempo.

Tampoco se debe olvidar que, a pesar de que el que paga manda, ahora se quiera mandar compartiendo pagos y pastel. Nico Rodríguez ya se ha dado cuenta, hoy ha hablado del pasado y del presente. Ha tenido más difícil hacerlo del futuro porque ni el propio José Sepulcre lo conoce con una gestión tan cortoplacista que relega la figura de tu director deportivo a segunda línea porque quieres pescar con tus redes la presa argentina que solucione los problemas de tu bolsillo. Da la sensación de que el botón de autodestrucción está demasiado al alcance de la mano y que es más fácil pulsarlo para volver a empezar que seguir andando el camino iniciado con las alforjas que te habías marcado desde el primer paso dado.

Futuro

No me gusta la situación. He visto un Nico Rodríguez al que la procesión le desfila por dentro a ritmo de tambor de Semana Santa. Rostro sonriente pero dientes apretados. Sensación de dónde me he metido si esto no es lo que a me habían vendido. ¿Dónde queda el proyecto a largo plazo para dar el salto a Primera División que José Sepulcre ha puesto en el escaparate como el que no entiende qué es el fútbol y qué es marcar objetivos a largo plazo? No lo veo. Aunque el respeto y la elegancia hayan sido la bandera del discurso del asturiano, haciendo de tripas corazón para entender que nada se puede hacer ante “la propiedad” porque es la que manda, mucho me temo que todo acabará explotando como en épocas anteriores ha sucedido y eso no es bueno para el Elche CF, sea quien sea el que pague y mande. Que lo explique la propiedad.