Tablas en el Martínez Valero

Elche CF | ELCHE 1-1 TENERIFE

Yacine celebra un gol con el Elche al Tenerife / LFP

Tablas en el Martínez Valero

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Elche

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Tenerife

El Elche empata ante el Tenerife en un duelo de alternativas para los dos equipos y sigue sin ganar como local.

Jorge Llopis,

La primera victoria en el Martínez Valero tendrá que esperar para un Elche que empató frente al CD Tenerife en un duelo con muchas fases. Los visitantes dominaron la posesión y los de Pacheta dispusieron de buenas fases para llevarse la victoria. El empate, justo, mantiene al conjunto ilicitano invicto por tercer duelo consecutivo y lo sitúa en la zona noble de Segunda; aunque el triunfo en casa todavía no haya llegado. 

Pacheta tiene muy claro cuál es su once tipo y mientras los resultados vayan saliendo, no parece que vaya a salirse de este guión. El hecho de jugar tres partidos en siete días no le impide optar por los mismos hombres que empataron ante el Lugo y vencieron en Oviedo. Buena señal. Finalmente Gonzalo Verdú y Yacine llegaron a la cita y pudieron estar ante el Tenerife.

Cuando un equipo va en dinámica positiva las buenas sensaciones se aprecian desde el primer minuto. El equipo está más entero, no lleva cadenas y la suerte sonríe con más frecuencia. Se pudo ver en el duelo frente a la escuadra canaria, en el que un Elche bien plantado sobre el césped se puso por delante en la primera llegada con peligro. Quien lo hubiera dicho en las primeras semanas del campeonato, cuando marcar gol parecía una utopía. Fortuna y acierto de Yacine, que remató con todo un balón que llegaba desde la esquina para confirmar que el doblete de Oviedo no fue casualidad y que entre sus virtudes de delantero también está la de marcar goles. Gran acción para zafarse de su defensor y marcar. 

El gol daba tranquilidad a la escuadra de Pacheta frente a un rival que se veía obligado a cambiar el guión inicial. Los chicharreros no se escondieron en el Martínez Valero y buscaron, con un juego combinativo, acercarse con peligro sobre la meta de Édgar Badía para tratar. Chocaron con el buen nivel de la defensa franjiverde, muy seria y atenta a lo largo de los noventa minutos. Únicamente la movilidad de Borja Lasso y Pere Milla en la medular hacía peligrar la ventaja.  

El Elche dejaba jugar. Los datos de posesión al descanso eran esclarecedores, 36-64, pero mordía más que su rival cuando entraba en terreno de acción. Las piezas, funcionan, pero todavía hay mucho que mejorar. Ramón Folch entiende mejor su papel y Gonzalo Villar empieza a soltarse. A ambos les falta continuidad. El primero se vio superado por la línea de creación rival y el segundo tiene desonexiones demasiado largas para esa desmarcación. Iván Sánchez no va tan suelto como la temporada pasada, aunque cuando tiene el balón siempre da sensación de qué algo va a pasar; y Fidel salva su irregularidad con buenas acciones de desborde. Ha dejado atrás su individualismo descontrolado. Lo más positivo, el atrevimiento de Óscar Gil en el lateral o el incomiable trabajo de Nino y Yacine. Independiemente de su capacidad goleadora, la labor que realizan el almeriense y el franco-marroquí es fundamental para entender la mejoría del equipo.  El Tenerife sufría de lo lindo con los balones largos y ahí Yacine tenía una baza que supo aprovechar para que los suyos respiraran ante el dominio visitante.  

En varias fases del juego, el Elche ofreció muy buenas acciones, aunque es cierto que no supo materializar estos momentos positivos en peligro sobre la portería de Ortolá. Hubo una oportunidad clara para cada equipo en la primera mitad. Yacine la marcó y Alberto, cuando el choque se encaminaba al descanso, cabeceó al palo tras una falta lateral. Si tu 9' las enchufa, ahí puede estar la diferencia entre ganar y perder.

Empata Borja Lasso

El guión del juego no cambió tras el paso por los vestuarios, peor sí el contexto. Si en la primera mitad el Elche aprovechó su primera llegada, en la segunda fue el Tenerife. Borja Lasso se adelantó a su marcador tras una falta lateral y puso las tablas a los ocho minutos de la reanudación. Imparable para Badía. La entrada del delantero Dani Gómez en el descanso le había dado resultado al técnico visitante Aritz López.   

Este tanto rompía los esquemas de los franjiverdes, que hasta entonces habían vivido muy cómodos sin balón y con el marcador a favor. Crecido tras el empate, el Tenerife se volcó sobre el área local y los de Pacheta vivieron sus peores momentos. El burgalés reaccionó rápido, dando entrada a Josan por Iván Sánchez. Como cambian las tornas. El jienense ha pasado de ser el mejor del pasado curso y un indiscutible a convertirse en uno de los posibles cambios. 

Ocasiones para Dani Gómez y Nino

El movimiento suavizó la reacción visitante, pero no saturó la herida. Los chicharreros siguieron dominando y tuvieron en la cabeza de Dani Gómez el segundo. Con todo a favor, cabeceó fuera. Los locales pedían a gritos un cambio de rumo. Pacheta movió ficha. Manu Sánchez como remedio para recuperar la medular. El movimiento funcionó. 

El Elche recuperó el balón y volvió a llegar con peligro sobre la portería de Ortolá. El balón parado era su mejor arma. La defensa visitante sufría en los balones aéreos y en varios saques de esquina estuvo cerca el gol franjiverde. Lo tuvo Nino, pero cabeceó fuera cuando el portero visitante estaba vencido. La posibilidad de VAR también entró en acción en unas manos dentro del área visitante que los árbitros del vídeoarbitraje no consideraron punible. El partido murió en terreno visitante, con un Elche que buscó un milagro de última hora ante un Tenerife que dio por bueno el empate en el tramo final. Claudio Medina volvió a ser el tercer cambio, pero no tuvo la oportunidad. 

 

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