El peor Elche en el momento más importante

Fran Escribá introdujo cinco cambios con respecto al duelo de Huesca y la revolución no funcionó. Si bien el cierto que el Elche dejó una pobre imagen en El Alcoraz y afronta el miércoles una final ante el Valladolid, pero en cualquier caso, el planteamiento en El Sadar tuvo lagunas. El listado de cambios alteró hasta la portería, donde Escribá dejó en el banquillo de forma sorprendente a Edgar Badía e hizo debutar a Gazanniga. Además, entró Diego González en el eje de la defensa, Palacios en el lateral derecho y Rigoni y Josan en los extremos. La única ausencia obligada era la de Fidel, por sanción. 

Los franjiverdes se sostuvieron en el partido, sin ser inferiores a su rival, pero vuelven a cometer errores, en las dos áreas y eso penaliza mucho en la máxima categoría. Falta de contundencia atrás e inoperancia ofensiva. Un balance demoledor para una plantilla del nivel de la franjiverde.

Osasuna aprovecha los errores franjiverdes

Superado el tanteo inicial, el empuje rojillo fue llevando el juego hacia el área franjiverde. Avisaron Moncayola y Kike Barja, en acciones que obligaron a intervenir a Gazzaniga. Era el preludio del primer gol. El empate se mantuvo hasta que el propio Barja abrió el marcador en el 38' de la primera mitad. 

No hubo reacción, ni si quiera tras el paso por los vestuarios. Boyé era un islote y Pere Milla no encontraba su sitio. Solo la insistencia de Josan desde el carril derecho daba algo de vida a los suyos en ataque, aunque sin apenas incidencia. El guion siguió su curso y Osasuna tuvo llegadas para sentenciar antes de tiempo. La más clara, una acción en la que Aridane remató al palo. La defensa franjiverde tenia agujeros y volvió a fallar para dar paso al 2-0. Gol en propia puerta de Diego González tras un desajuste de Helibelton. Dos minutos antes, Escribá había movido ficha dando entrada a Piatti y Tete Morente. 

El partido siguió su curso, con un Osasuna cada vez más cómodo y un Elche que continuaba perdido. 
Entraron Nino y Víctor Rodríguez a falta de un cuarto de hora para el final. El quinto cambio fue Luismi por Marcone. Nada cambió. El duelo acabó con un Elche ahogado en una preocupante falta de estilo, cuando tan solo quedan siete jornadas para el final de curso.