El Elche que viene

El Elche CF 2022/2023 ya está en marcha. Aunque el equipo franjiverde debe materializar la permanencia en Primera División el próximo domingo ante CA Osasuna, los movimientos de despachos se suceden en la planta noble del estadio Martínez Valero. Christian Bragarnik hila fino para poder dar forma al que será su primer proyecto en solitario al frente del club ilicitano desde principio de curso, toda vez que la pasada campaña el propietario argentino se apoyaba todavía en Nico Rodríguez como director deportivo. Aunque el sudamericano ya ha movido fichas durante el pasado mercado invernal, el verano de 2022 será su primera prueba de fuego.

Christian Bragarnik deberá decidir un camino en el que lo deportivo y lo económico pueden trazar bifurcaciones en la confección de la plantilla. El argentino tiene dos piezas con las que puede hacer caja durante los próximos meses. Un adiós de Lucas Boyé o Johan Mojica, o ambos durante el próximo verano, significaría ingresos importantes para las arcas de la entidad del Martínez Valero pero también un bajón deportivo considerable para el devenir del equipo. El argentino tiene una cláusula de 25.000.000 de euros y clubes como Sevilla CF ya preguntaron por él el pasado mes de enero en el mercado invernal poniendo 12.000.000 de euros no aceptados sobre la mesa.

Contrato en vigor

El nombre del argentino se relacionó desde Barcelona con el Camp Nou como desde Madrid se habla de un presunto interés del Atlético de Madrid. Lucas Boyé tiene contrasto con el Elche CF hasta junio de 2024 y, aunque su rendimiento goleador ha bajado durante las últimas semanas (lesión incluida) ha debutado con Argentina en partido oficial. Un buen motivo para estirar la cuenta. Por su parte, Johan Mojica tiene contrato también hasta 2024 tras el club haber pagado al Girona FC un montante que rondaba 1.200.000 euros. El cafetero tiene una cláusula de 5.500.000 euros que clubes como el Atlético de Madrid, apuntan desde Colombia, están interesados en negociar.

Además, Bragarnik también está atento a los movimientos que el mercado pueda dejar en torno a jugadores de proyección que si bien no tienen un rol principal en el Elche CF son motivo de seguimientos de clubes por su proyección y juventud. Es normal ver en el estadio Martínez Valero scouttings de equipos de otras ligas europeas. Habituales son los ojeadores de  Leeds UFC, West Ham UFC, Watford o Everton FC, entre otros, de la Premier League que apuntan en sus libretas nombres como los de ‘Tete’ Morente o Raúl Guti, además de los mencionados anteriormente como Lucas Boyé o Johan Mojica.

Renovaciones en el aire

Más allá de estos nombres, también aparecen otros de futbolistas que, a día de hoy, no han renovado su relación contractual con la entidad franjiverde y el Elche CF desea que sigan vistiendo la camiseta ilicitana. Pere Milla y Omar Mascarell son dos de ellos, como Diego González. El primero lleva meses negociando una ampliación del vínculo, a pesar de las cláusulas que figuran en su contrato, por tres temporadas. El Valencia CF y la Real Sociedad han tocado a su puerta mientras que el segundo estaría dispuesto a continuar pero también von una seguridad deportiva y económica que se ajuste al rol que ha tenido esta temporada siendo el líder de la medular franjiverde.

Futbolistas como Fidel o Josan han renovado sus vínculos, mientras que la permanencia matemática en Primera División hará oficial la continuidad de Edgar Badía, al menos hasta junio de 2023. No hay que olvidar nombres como el de John Chetauya y José Salinas, este segundo volverá  a Elche desde Salamanca, que han ampliado y han mejorado sus contratos para ser piezas de fututo de la entidad franjiverde. Tampoco hay que olvidar que el club tiene opciones de compra sobre jugadores como Lucas Olaza, Kike Pérez o Ezequiel Ponce. Futbolistas ya adaptados al grupo que pueden ser soluciones deportivas si el precio se ajusta a las ideas que tenga Bragarnik de cara al próximo mercado veraniego.