El Elche no da la talla

El Elche sigue sin activarse. Los franjiverdes sucumbieron ante un Atlético muy superior, que movió el partido como quiso y no necesitó mucho para llevarse los tres puntos del Martínez Valero. Una jugada de estrategia tras un córner, que contó con el beneplácito de una débil defensa franjiverde, y una galopada de Mandzukic sentenciaron a un Elche falto de intensidad e inoperante en ataque.

Escribá optó por el equipo de las últimas semanas con la única novedad de Coro en lugar de Cristian Herrera. Sigue sin funcionar. Es cierto que enfrente estaba uno de los peores rivales para dar un golpe de efecto, el campeón, pero el equipo muestra una preocupante falta de recursos. Flojo en defensa, donde dio demasiadas facilidades a un rival que no perdona, y espeso en ataque. Aseguró Escribá que sus jugadores igualarían la intesidad de los rojiblancos. Se quedó en una declaración de intenciones. Sin respuesta por parte de sus hombres.

A los 16 minutos de partido y tras la salida de un córner, Giménez adelantó a los visitantes. Los atléticos tocaron con demasiada facilidad en la zona de peligro. Hubo fuera de juego de Arda en uno de los pases. Ni a esa excusa puede agarrarse el Elche. Koke pudo aumentar la brecha en un lanzamiento de falta que rebotó en la barrera. Sin pisar el acelerador, los de Simeones ganaban y dominaban con comodidad. 

El gol no hizo reaccionar a los franjiverdes, incapaces ante la fortaleza física de los rojiblancos. Jonathas se encontraba muy solo arriba, los mediocampistas apenas llegaban al área y Mosquera se encontraba superado por el centro del campo visitante. Un lanzamiento lejano de Fayçal que se envenenó y puso en aprietos a Moyá fue la única respuesta de los locales.

Mandzukic sentencia 

Tras la reanudación se esperaba una reacción del Elche. Pero el partido murió en el minuto 52. Mandzukic aprovechó un balón largo para dejar atrás a Lombán y batir a Tyton. El balón entró por el palo que cubría el portero polaco, que acumula más sombras que luces. Es evidente que la portería no funciona. Otro quebradero de cabeza para Escribá.

Los cambios no surgieron efecto. El técnico dio entrada a Cristian Herrera para buscar más presencia en ataque. Sin noticias del Elche en el área de Moyá. Con un único lanzamiento a portería en toda la segunda parte poco resultado se puede obtener. La entrada de Franco Fragapane, un argentino del filial, mejoró los ánimos en ataque. Pero ya no había tela que cortar. El Elche seguía enrededado en la telaraña atlética mientras que los visitantes pudieron aumentar la venta a la contra.

Una nueva derrota que mantiene al conjunto ilicitano en posiciones de descenso. No es el Atlético la mejor vara de medir, pero se esperaba más del Elche. Próxima parada: Coruña. La Liga donde no se puede fallar.